En la Campaña actual, hay una menor incidencia de Mosca del Olivo (Bactrocera oleae). Se observa ataque en frutos en algunas provincias como Cádiz, Córdoba, Huelva y Sevilla, siendo significativamente destacable los datos registrados en la provincia de Cádiz, con un valor medio provincial de 4’90% de picada total y 0’30% de picada viva. En el resto de provincias en donde se detecta picada, la incidencia es baja, con unos valores inferiores al 0’10% de picada viva.
Por las condiciones meteorológicas registradas durante el mes de agosto, con periodos más o menos largos de elevadas temperaturas han dificultado la actividad de este agente y por tanto la presencia sobre el cultivo.
La temperatura idónea para el desarrollo de la mosca del olivo, se sitúa en torno a 20 – 25ºC. Temperaturas inferiores a 6ºC y superiores a 35ºC, restringen terminantemente los diferentes estados de desarrollo de este agente. Los veranos suaves y de humedad relativa alta, son los más favorables para el desarrollo de la mosca, por el contrario, el bajo porcentaje de humedad relativa y temperaturas altas, disminuyen la viabilidad de los huevo y de las pequeñas larvas.
Aunque es la baja incidencia sobre el cultivo, hay que estar atentos y seguir realizando observaciones periódicas, para poder tomar las medidas oportunas con la suficiente antelación a que se produzcan daños importantes.

0 comentarios:
Publicar un comentario